«Sé tú mismo, los demás puestos ya están ocupados»
Oscar Wilde (La oveja negra de la literatura)
«Sé tú mismo, los demás puestos ya están ocupados»
Oscar Wilde (La oveja negra de la literatura)
Te cuento quién soy y cómo llegué aquí
Gracias internet, gracias
Muchas personas han mejorado su vida gracias a internet y entre ellas estoy yo.
Conocí el copywriting gracias a las redes sociales.
Hace unos años, mientras navegaba en Facebook me salto un anuncio sobre una formación que se llamaba: #Soycopywriter “Vive de escribir”
¿Era broma?
Pinché sobre el anuncio y me encontré con Javi Pastor y su escuela big bang Conversion.
La radiación que recibí de ese big bang fue tan grande, que me formé como copywriter profesional y aquí me tienes, viviendo de escribir.
Hasta en la sopa prefiero la de letras
Las clases de física y de matemáticas del instituto no eran lo mío, prefería las de teatro.
Me gustaba todo lo que tenía que ver con las artes escénicas, la literatura y por supuesto el teatro.
Sí, estudie arte dramático.
El teatro y la dramaturgia me enseñaron la singularidad que hay en cada persona.
El teatro me brindó herramientas muy valiosas para escribir con más empatía, entender las emociones, la psicología y conducta humana.
Todo lo anterior es necesario en el marketing digital de un negocio.
Súbete a la máquina digital
Durante el tiempo que he trabajado como redactora, he conocido a muchas personas que han decidido emprender, otras que llevan toda la vida con sus negocios y se dejan la piel mejorando la vida de muchas personas. Generan empleos y bienestar a través de sus negocios.
El marketing digital (la mayoría de las veces), suele convertirse en un trabajo engorroso, que les llena de tareas agobiantes, ya sea por falta de tiempo o por desconocimiento de las herramientas digitales.
Y es normal, no podemos saber de todo.
No permitas que tu negocio, ese donde has puesto tanto esfuerzo económico, emocional y laboral se quede atrás.
Hoy, la forma de vender y de conectarnos ha cambiado, evolucionar es humano, súbete al tren bala, que la máquina de vapor ya es pasado.
Clientes muy currantes y extraordinarias personas